El Templo Gotokuji — Gatos, gatos y gatos.

La figura del gato que mueve la pata saludando a los clientes se ha convertido en algo con lo que todos estamos familiarizados en mayor o menor medida. No obstante, la historia de este gato a veces no es tan conocida.

Hay muchas variaciones de esta leyenda, pero la más conocida tiene lugar en la era Edo, cuando un señor feudal pasó por un templo en Edo, en nombre con el que se conocía al actual Tokio. En éste se encontró con un gato que, con la pata, le invitó a entrar dentro. El hombre accedió y decidió seguir al gato y, poco después, llegó una fuerte tormenta. Agradecido por el gato, ya que gracias a él pudo refugiarse en el templo durante la tormenta, decidió hacerse con el templo y reconstruirlo. A raíz de esto, la gente empezó a traer figuras de gatos cuando se cumplían sus deseos.

Las figuras de este gato, en japonés se conocen comunmente como maneki neko (招き猫).

©: かがみ~ | Flickr

El Templo Gotokuji en Tokio

El templo en el cual se dice que paso esta leyenda se encuentra en el barrio de Setagaya, en el lado oeste de la ciudad de Tokio. Setagaya es un barrio residencial muy tranquilo por lo que, a parte del templo, no hay mucho más que hacer, pero el templo hace que merezca la pena ir a visitarlo.

En el templo Gotokuji, se pueden encontrar un gran número de estas figuras de gatos por todo el recinto. Además, si se visita durante la época de los cerezos en flor, es un buen lugar donde poder admirarlos.

©: Dennis Amith | Flickr

Cómo llegar

La estación más cercana al templo Gotokuji es la de Miyanosaka de la línea Tokyu Setagaya. Desde ésta se tardan unos 5-10 minutos hasta el templo. Otra alternativa es la estación de Gotokuji, en la línea Odakyu Odawara desde la que se tardan unos 15 minutos.

 

© Imagen de cabecera por Senna Channel | Flickr